Fuentes dentro de la producción dijeron a The Hollywood Reporter que al menos dos escenas claves se han planeado para Episodio VIII (15 de diciembre) y Episodio IX (2019): una reunión de Leia con Luke Skywalker (Mark Hamill) y una confrontación con Kylo Ren (Adam Driver), su hijo que mató a Han Solo (Harrison Ford) en El Despertar de la Fuerza.
Trevorrow, cineasta detrás de Jurassic World dirigirá el Episodio IX, tiene previsto llegar a Los Ángeles la semana del 10 de enero para reunirse con Kathleen Kennedy de Lucasfilm para discutir las opciones. Pero a diferencia de otros casos donde actores murieron durante el proceso de grabación — Paul Walker en A Todo Gas 7 viene a la mente — parece que el equipo tiene tiempo para explorar soluciones.
Otra solución es usar CGI; una reducción del papel de Leia podría significar que sólo aparecería en pequeños momentos. "Rogue One es la hoja de ruta", dice una fuente de Star Wars, refiriéndose a la resurreción de Peter Cushing y el rejuvenecimiento de Fisher por parte de Lucasfilm en el actual éxito de taquilla.
"No tengo ninguna duda, dado algunos de los trabajos recientes que he visto, que hay cineastas que estarán dispuestos a aceptar el reto," dice Michael Fink, supervisor de efectos Visuales ganador del Oscar quien da clases en la USC. Pero, "hasta ahora, hemos visto momentos precisos pero no actuaciones completas". Él dice que también hay cierta ética de peso: "¿Debemos crear roles adicionales para la Princesa Leia? No lo creo."
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